En 1994, cuando Fran Blanche se inicia en el mundo de la fabricación de pedales, no existía tal cosa como una escena boutique, y con seguridad la idea de personas pagando miles de dolares por estas cajas de efectos oxidadas y obsoletas no era menos que absurda.
Pero el Movimiento Alternativo se encargo de rescatar estas viejas cajas de las casas de empeño y de los baúles de estudios de grabación, y de devolverlos a los escenarios, a la vez que revivieron el negocio de hacer pedales.
En este ambiente nace Frantone Electronics, productora de overdrives, fuzzboxes, y sin querer pionera del negocio boutique. Luego de un par de años en su propio negocio artesanal, Fran Blanche toma un trabajo en Electro-Harmonix, donde tendría la tarea de rediseñar nada mas y nada menos que una de las unidades responsables del stomp-box revival: el NYC Big Muff Pi.
Luego del diseño del NY BMP Reissue, Fran revive a Frantone Electronics y comienza una historia accidentada pero muy prolífica, con una serie de diseños originales.
Dentro del catalogo de Frantone, dos unidades se destacan en popularidad. La primera es el Vibutron, un tremolo analógico con un diseño innovador en su momento, y que aterrizo en la portada del libro Guitar Effect Pedals: the Practical Handbook. El otro diseño por el que es conocida la marca es el Peach Fuzz. A pesar de ser uno de los primeros diseños de Frantone, su nombre resurgió a mediados de la primera década del 2000, cuando Danelectro lanza su línea de pedales Cool Cat, y la comunidad de DIYers notara la enorme similitud del circuito del fuzz de la nueva gama de Danelectro con el peculiar arreglo de tres op-amps del Peach Fuzz.
Recientemente, gracias a una exitosa campaña en Kickstarter, Frantone Electronics esta de regreso, con la edición de dos de sus fuzztones basados en circuitos integrados: El popular Peach Fuzz y el Cream Puff, ambos con un sonido en el terreno del Muff, pero cada uno con su carácter propio.
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